jueves, 1 de noviembre de 2012

Religiones, una historia de amor


Religiones, una historia de amor

Antes de empezar a leer este artículo, si usted profesa algún tipo de creencia o práctica religiosa queda advertido de que este artículo puede herir su sensibilidad. A pesar de ello, animo a todos a leerlo y como siempre, a buscar su propia reflexión.

Así es, hoy vamos a proceder a hablar de un tema que ha sido y es muy polémico: La Religión, y como siempre comenzaremos dando una pequeña definición de religión.

Una religión se trata de un conjunto de sucesos, ideas, hechos, objetos o escritos hacia los cuales un conjunto de personas profesan dedicación, obediencia, fidelidad y adoración, además en toda religión suele haber una deidad suprema que permite al practicante entender la vida, el mundo y el universo ( por supuesto desde el propio punto de vista de la religión).

Así, ciñéndonos a la definición y considerando la existencia de un gran número de religiones en el mundo en el que hoy día vivimos, podemos llegar fácilmente a la conclusión de que las religiones son grupos cerrados, en el sentido que cada religión proclama ser conocedora de la verdad absoluta, siendo las demás religiones falsas en consideración a esta.

Por lo tanto esto ha generado y genera una serie de problemas bastante graves:

1º. Filosoficamente hablando, las religiones ofrecen al creyente/practicante una verdad absoluta que permite al creyente/practicante comprender todo acerca de la vida y el universo, teniendo el creyente/practicante que dar a cambio su fidelidad y su cumplimiento de los dogmas ( leyes y normas) que esa religión le impone.

Por ejemplo, imaginen que yo creo una religión en la que les digo a mis lectores que si me leen todos los días, los conduciré hacia la salvación.

Hasta aquí todo perfecto... el problema reside en el gran número de religiones que hay, de forma que cada una ofrece una verdad absoluta. ¿Resultado? Solo hay dos posibles:

Que todas las religiones sean "verdaderas"
Que ninguna religión sea verdadera.

Analicemos los dos resultados:

El hecho de que todas las religiones sean verdaderas implicaría el hecho de que sus verdades fueran comunes, o que, aun no siendo comunes, que al menos no se rechazaran entre sí.

Sin embargo si analizamos cada una de las religiones del mundo, podemos ver, no solo que no tienen apenas elementos en común unas con otras ( algunas si) sino que en muchisimos casos, las verdades de unas anulan las verdades de otras, por lo que esta falta de compatibilidad entre religiones provoca que no pueda ser el primer resultado.

Y por lo tanto, tan solo nos queda el segundo resultado, es decir, el hecho de que ninguna religión sea verdadera ¿ Y por qué? Pues por lo que hemos visto antes... por el hecho de que se anulan mutuamente y si se anulan mutuamente solo puede significar que ninguna de ellas sea verdadera, ya que para establecer una verdad, todas tendrían que serlo.

En definitiva, de acuerdo a la reflexión lógica-filosófica anterior, podemos establecer que ninguna religión es verdadera.

2º Socialmente hablando, las religiones han sido ( Ya han perdido mucha fuerza) grandes manipuladoras de la sociedad a lo largo de toda su historia.

Esto se debe fundamentalmente al hecho, de que una religión, impone su dogmatismo al creyente/practicante y no solo eso sino que históricamente, esta imposición se realizaba mediante la fuerza.

Por tanto, las religiones siempre han sido adormecedoras del pueblo y de los ciudadanos.
Han sido manipuladoras de la verdad y de la ciencia, de los avances sociales, de las ideas ilustradas y revolucionarias  han sido y son controladoras de la vida de las personas en todos sus ámbitos, desde que estas nacen hasta que estas mueren, y si lo han sido, lo han hecho con la finalidad de controlar al ciudadano, de registrar al ciudadano en los aspectos más íntimos de su vida, y sobre todo y lo más grave...

Han sido grandes amansadoras del pueblo ¿ A qué me refiero con esto? Pues sencillamente, a que las religiones han intentado implantarnos un carácter conformista conforme a sus propios intereses, de forma que éstas le arrebataron al ciudadano la capacidad de auto reflexión y autodeterminación que es lo que nos convierte en humanos y nos diferencia de los animales... es aquello que denominamos inteligencia,

¿Y que sería de la inteligencia sin nuestra capacidad de auto reflexión?

¿Que ocurriría si todo nos lo "masticasen"?

Pues que perderíamos la capacidad de decidir por nosotros mismos y recurriríamos constantemente a alguien "superior" a nosotros para que tomara esas decisiones en nuestro lugar.

Y eso es precisamente lo que han conseguido las religiones, junto a otros medios, a lo largo de gran parte de la historia del ser humano.

Lo que somos hoy, lo somos en gran medida debido a lo que fuimos antes, y lo que fuimos antes se llamaba esclavitud en muchos sentidos, esclavitud religiosa por supuesto, que de hecho gran parte del mundo sufre actualmente, esclavitud filosófica al ser negada nuestra capacidad de auto reflexión  esclavitud ideológica, al ser obligados a pensar de una determinada manera... y una serie de esclavitudes en las cuales las religiones intervinieron e intervienen de forma notoria.

Por ejemplo, y sin ir más lejos, en España hasta hace muy poco tiempo, el hecho de practicar la religión ( No nombrare la susodicha religión que todos sabemos) era algo "casi" obligatorio, de manera que la persona que no practicaba era además de marginada socialmente, considerada como una especie de proscrito, criminal, o algo incluso peor...

Y ante estos dos problemas que hemos planteado, se nos genera una serie de incógnitas ¿Cual es la verdadera finalidad de las religiones? ¿ Como enmascaran sus actos? ¿De que se valen para ganar poder? Las cuales analizaremos detenidamente:

¿Cual es la verdadera finalidad de las religiones?

La finalidad sin duda es doble:

Por un lado, entendiendo la religión como una empresa, tiene como finalidad aumentar el beneficio y la rentabilidad... hablando claro, una religión tiene como finalidad obtener recursos económicos para su propio beneficio y mantenimiento ( Solo hay que entrar en una catedral para ver la cantidad de oro, cuadros y bienes de valores económicos descomunales, solo hay que ver los lujos que muchas religiones ostentan, los palacetes de los cuales se sirven... etc)

Por otro lado, y entendiendo a las religiones como mecanismos de control, su finalidad consiste en controlar al pueblo o ciudadanos para implantarles a esto, la manera por la que deben de vivir sus vidas y las normas dogmáticas que estos han de obedecer incondicionalmente.

En definitiva, las religiones son organismos de control social y económicos.

¿ Como enmascaran sus actos?

Hasta hace apenas un siglo, para las religiones no era necesario enmascarar sus actos, ya que tenían la suficiente fuerza social y por supuesto militar, para no considerar poner mascaras a sus acciones.

Sin embargo y debido a la enorme evolución social producida en las últimas décadas  se ha convertido en algo absolutamente necesario, el hecho de adoptar mascaras para enmascarar sus verdaderos objetivos.

Estas mascaras se reflejan principalmente en campañas de ayuda humanitaria en las que las religiones afirman aportar una gran cantidad de recursos para solver problemas del mundo como el hambre, la escasez de salud o la analfabetización.

Por supuesto, es cierto el hecho de que las religiones aportan bastante hablando en estos términos, pero detrás de todas esas aportaciones, existe la finalidad de convertir a toda costa.

Me explico: Las religiones no ayudan a los necesitados de forma incondicional, sino que subliminalmente inducen a estos a creer y practicar su religión, por lo que aunque reconocemos la ayuda humanitaria que prestan, también hay que considerar la manipulación ideológica que ejercen en la prestación de la misma, por lo que no es oro todo lo que reluce.

¿ De que se valen para ganar poder?

Fundamentalmente de la muerte, o más bien, del miedo a la muerte tratándose este miedo que es totalmente humano, el principal pilar de las religiones, ya que en este mundo, en esta vida, podemos conocerlo todo, y lo que no podemos conocer nos inquieta, nos quita el sueño, nos asusta y nos desvela... No hay mayor miedo, que el miedo a lo desconocido, y mucho más si lo desconocido es la propia muerte, el fin de la existencia, el final del camino...

Por ello, las religiones se han válido de este fenómeno para ofrecer "Tickets de primera clase al cielo" con la única ( eso de única...) condición de que la persona que quiera salvarse, siga dicha religión y por supuesto la practique.

En conclusión y para no extender mucho más el artículo, animaría a todos ( tanto creyentes como no creyentes) a reflexionar acerca de este artículo... Espero que os haya gustado. Un saludo a todos.

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